En este escrito se presenta el modelo antropológico de I.M. Lewis sobre posesión espiritual y práctica exorcista y se aplica al caso de Jesús de Nazaret. Su objetivo es mostrar la íntima relación que existe entre la práctica exorcista de Jesús, y otros aspectos mejor conocidos de su actuación, como su predicación ética y el anuncio del reinado de Dios
